Coches con conducción autónoma: estos son los 50 coches con los que se puede conducir sin las manos en el volante

• General Motors fue la primera marca del mundo en ofrecer un sistema de conducción “manos libres”, con sistema Super Cruise, en 2017. Desde entonces, muchos otros fabricantes han desarrollado sistemas de ese tipo y circular por carretera sin las manos en el volante ya es una realidad que ofrecen 50 modelos en todo el mundo.
• Esta tecnología está mucho más desarrollada en Estados Unidos que en el resto del mundo. En China no está permitida y en España solo hay un modelo homologado para circular, en determinados tramos, sin las manos en el volante: el Ford Mustang Mach-E equipado con el sistema Ford BlueCruise.
• La mayoría de los sistemas existentes (46 modelos) corresponden a un nivel SAE de conducción autónoma “2+”: este sistema permite circular sin las manos en el volante, pero exige al conductor no apartar la vista de la carretera. Solo tres marcas y cuatro modelos en el mundo ofrecen un nivel SAE de conducción autónoma 3, en el que el conductor puede desentenderse de la conducción y realizar otras tareas, como ver una película, mientras el coche circula de forma autónoma.

El primer automóvil en poner en la calle el nivel 3 de conducción autónoma, en marzo de 2021, fue el Honda Legend, cuya tecnología nivel 3 Traffic Jam Pilot está aprobada por las autoridades japonesas en determinados entornos y hasta 50 km/h de velocidad. Este modelo marcó un hito histórico al ser el primer coche del mundo autorizado para que el conductor pueda apartar su atención de la carretera y realizar una actividad secundaria mientras el vehículo conduce solo.

El segundo fabricante fue Mercedes-Benz, cuyos modelos Clase S y EQS recibieron en diciembre de 2021 la aprobación de la Autoridad Federal de Transporte Motorizado de Alemania; y en enero de 2023, la aprobación del estado de Nevada (Estados Unidos), en ambos casos, hasta 60 km/h y en determinado tipo de vías. El sistema Drive Pilot de Mercedes-Benz que se actualizó a finales de 2024 y desde 2025 funciona en tráfico fluido de hasta 95 km/h, bajo ciertas condiciones, en toda la red de autopistas alemanas. Esta velocidad lo convierte en el sistema nivel 3 más rápido del mundo. 

El tercer fabricante en conseguir un sistema de nivel 3 homologado para su uso en vías públicas fue BMW, con la tecnología BMW Personal Pilot L3. Disponible para el BMW Serie 7 desde la primavera de 2024, este sistema permite a los conductores redirigir su atención a otras actividades a velocidades de hasta 60 km/h, en autopistas de Alemania con calzadas separadas estructuralmente. Gracias a sus sensores especialmente sofisticados, es el primer sistema de este tipo que también puede utilizarse en la oscuridad.

46 modelos con nivel “2+” de conducción autónoma sin manos en el volante 

GM, con Super Cruise, es el fabricante que tiene esta tecnología más extendida. Tanto por número de marcas (Cadillac, Chevrolet, GMC y Buick) y modelos (nada menos que 23 –ver listado completo al final-), como por la cobertura territorial. En Estados Unidos funciona en más de 640.000 kilómetros que incluyen las principales carreteras. Y también está disponible en Oriente Medio y Corea del Sur. Los propietarios de estos vehículos ya han recorrido más de 1.100 millones de kilómetros con Super Cruise activado y no se ha reportado ningún accidente atribuible a esta tecnología. 

Nissan lanzó en 2019 el sistema ProPILOT 2.0. Disponible en Japón, y en determinadas carreteras de Estados Unidos y Canadá, ayuda al conductor a viajar por una autopista de varios carriles hasta llegar a la salida de la autopista en una ruta predefinida en el navegador, y permite conducir sin las manos en el volante al circular por un carril determinado. Está disponible el Skyline y el Ariya. 

BMW es el único fabricante que ofrece un sistema de Nivel 3 (BMW Personal Pilot L3, solo en Alemania) y de nivel 2+ (BMW Highway Assistant, en Estados Unidos, Canadá y Alemania). El BMW Serie 7 puede incorporar ambos, mientras que los BMW Serie 5, X5, X6, X7, XM e iX solo pueden equipar el segundo. El BMW Highway Assistant permite al conductor retirar las manos del volante a velocidades de hasta 130 km/h. 

La tecnología ‘Ford BlueCruise’ también permite una conducción “manos libres” y es la única que se ha homologado para su uso en España, en determinados tramos de carretera designados como "Blue Zones", que cubren más del 90% de las autopistas y autovías españolas. Cuando el coche entra en una “Blue Zone”, el vehículo comprueba que las líneas del carril se distinguen correctamente, que no hay situaciones conflictivas delante y que el usuario mantiene la mirada en la carretera; a partir de ese momento se abre la posibilidad de continuar sin las manos en el volante. La tecnología de Ford fue la primera en recibir aprobación para circular dentro de Europa y se ha extendido a 16 países. Disponible en el Ford Mustang Mach-E, pasará a estar disponible en Europa en los Puma, Puma Gen-E, Kuga y Ranger Híbrido enchufable desde la primavera de 2026. En Estados Unidos, se ofrece en los Ford F-150 y F-150 Lightning, Expedition, Explorer y Mustang Mach-E; además de en los Lincoln Navigator, Nautilus, Corsair y Aviator; a través del sistema equivalente ActiveGlide.

Dos marcas estadounidenses más disponen de esta tecnología. Lucid, con el sistema DreamDrive en los modelos Air y Gravity; y Rivian, con el sistema Enhanced Highway Assist que pueden equipar los modelos R1T y R1S. A pesar de sus notables avances en sistemas de asistencia a la conducción, Tesla no tiene un sistema de conducción “manos libres” homologado. Los sistemas Autopilot, Autopilot3 y Full Self-Driving (FSD) están diseñados para que el conductor lleve las manos en el volante y esté preparado para tomar el control en cualquier momento. Si bien estas funciones están diseñadas para mejorar su capacidad con el tiempo. 

Toyota (sistema Teammate) y Lexus (Advanced Drive) también ofrece conducción “manos libres” en determinadas carreras de Estadio Estados, Canadá y Japón, en los Toyota Mirai y Lexus LS 500h. 

No hay ninguna marca china que haya homologado un sistema de conducción autónoma nivel 2+ que permita conducir sin las manos en el volante. Muchas marcas y modelos disponen de una tecnología muy avanzada que podría realizar esas funciones, pero en China es imposible homologar un sistema L2+, porque la normativa exige que el conductor mantenga las manos en el volante. Ninguna marca china ha homologado un sistema de ese tipo fuera de sus fronteras. Los fabricantes chinos se están saltando este paso y están trabajando directamente en sistemas L3 y L4, con nueve marcas realizando ensayos de validación con prototipos en carreteras abiertas al tráfico ¿Cómo funcionan estos sistemas?

El parabrisas es un elemento clave en todas estas tecnologías, pues aloja los sensores y cámaras del sistema por su posición estratégica. Esas cámaras y sensores ven lo que sucede alrededor del coche y recogen esa información para que los procesadores del vehículo puedan realizar un reconocimiento fiable del entorno a través de procesamientos clásicos de imágenes, combinados con métodos de inteligencia artificial. Con toda esta información, el sistema realiza reconocimientos, predicciones y decisiones, y controla la aceleración, la frenada y la dirección, para a conseguir una conducción fluida y de máxima calidad.

Las cámaras trabajan en conjunto con el radar, que determina la velocidad relativa, distancia y posición de los objetos que se encuentran en los alrededores del vehículo; y con el sensor LiDAR, que mide con precisión la distancia, posición y altura, en tres dimensiones.

Cuando se sustituye un parabrisas hay que desmontar las cámaras del cristal roto y montarlas en el nuevo. Una vez instalados, estos sistemas han de ser recalibrados por especialistas cualificados para asegurar que funcionan con la máxima precisión y proporcionan la información correcta. Cuando esta operación no se realiza, o se hace de forma incorrecta, los sistemas de seguridad no reconocen bien el entorno, ni son capaces de calcular bien las distancias ni el tiempo, lo que puede provocar accidentes.