Las lunas del vehículo son uno de los elementos de seguridad más importantes del mismo, como hemos demostrado durante muchos años desde Carglass®. En ocasiones, su mal estado puede llevarnos a que nos encontremos en la situación de tener que realizar una sustitución de lunas. Más aún si es el parabrisas el que ha sufrido un posible impacto. En ocasiones, sin embargo, pulir los cristales del coche puede ser suficiente para solucionar posibles problemas de visibilidad que puedan aparecer en los mismos. Y es que una luna del coche rayada puede derivar en problemas que pongan en peligro la seguridad en la conducción, no solo del propio conductor, sino la de los demás ocupantes del vehículo. Un simple arañazo en la vista del conductor puede provocar que se produzcan reflejos molestos del sol o por las luces de otros vehículos en la carretera. Si llegas a temer por tu seguridad, lo más recomendable es sustituir la luna: es un proceso de un máximo de 90 minutos para el que tan solo tendrás que pedir cita online.
Pulir los cristales del coche no solo mejora la visibilidad, sino que también contribuye a la importancia de los cristales en los coches como parte esencial de la seguridad vehicular. Este proceso puede ser una solución efectiva para retrasar la necesidad de cambiar el parabrisas antes de que el problema empeore. Las lunas del vehículo, especialmente el parabrisas, están constantemente expuestas a agentes externos que pueden deteriorar su estado. Por ejemplo, unas escobillas en mal estado pueden ocasionar rayas en la luna delantera del coche, que, aunque no son un impacto directo, hacen necesario un pulido para eliminarlas y restaurar la claridad y seguridad en la conducción.

¿Qué necesitamos para pulir los cristales del coche?
Además de saber qué tipo de cristal tiene tu coche y saber sus diferencias, lo más cómodo para llevar a cabo este tipo de trabajo es hacerse con un kit de productos básicos. Este kit lo podemos encontrar en establecimientos especializados en el mundo del automóvil. Este tipo de packs incluyen todo lo necesario para llevar a cabo el proceso de pulir los cristales del coche:
- Trapos limpios.
- Productos de limpieza para que el cristal esté totalmente limpio y libre de posibles impurezas antes del proceso.
- Herramientas para el pulimentado en función de si lo hacemos a mano o con una máquina.
Otro de los elementos indispensables es el líquido: en función de la calidad del que escojamos podremos eliminar con mayor o menor facilidad las marcas de los cristales; un producto de menor calidad o no recomendado para este tipo de trabajos puede provocar daños en la luna. Si esto ocurre, la solución sería una sustitución del cristal del coche.
Métodos para pulir los cristales del coche
Estamos ante una tarea sencilla y que no debería conllevar mucho tiempo invertido en el proceso. Si se hace bien, el resultado es muy visible, facilitando la visibilidad y aumentando la seguridad en la conducción.
- Lo primero que debemos hacer es hacernos con un kit para pulir los cristales del coche en un centro especializado en este tipo de productos.
- Antes de pulir el cristal, se debe limpiar el mismo en toda su superficie para retirar toda la suciedad y las impurezas que pueda tener. Esto podemos hacerlo con agua y jabón o con el producto de limpieza incluido en el kit que hemos comprado anteriormente. Se debe emplear el tiempo necesario en este punto, ya que cualquier partícula puede arruinarnos el resultado final.
- El siguiente paso es aplicar el líquido para pulir en el cristal. Debemos hacerlo en las zonas afectadas, o poco a poco si la intención es pulir toda la superficie de la luna. Podemos hacerlo a mano con las almohadillas que vendrán incluidas en el pack, o con una máquina pulidora utilizando las almohadillas correctas para este fin.
- La luna del coche rayada dejará de estarlo a medida que vayamos eliminando las rayas del cristal. Una vez eliminadas y aplicado el producto, el último paso es limpiar el cristal con agua para retirar los restos de líquido que pueda haber quedado y observar si el resultado obtenido es el deseado.
Este proceso en ocasiones es suficiente para alargar la vida del parabrisas u otras lunas del vehículo, pero no siempre es así. Si después de pulir los cristales del coche aún sientes que tu seguridad al conducir está comprometida, es el momento de pedir cita en uno de nuestros talleres. De esta forma evaluaremos el estado de la luna y estimaros si es necesario sustituirla. ¡Te esperamos!