Ahora que nos vamos adentrando poco a poco en las cada vez más frescas temperaturas del otoño, no nos acordamos tanto de cómo ha sido el sofocante calor de los meses pasados. Independientemente de la época del año en la que nos encontremos, nunca está de más hacer un repaso de algunos trucos que nos pueden ayudar a refrigerar el interior del vehículo para conducir de una forma más agradable.
Si eres un conductor asiduo, sabrás lo incómodo que resulta estar pendiente del coche y de la circulación cuando la temperatura es demasiado elevada. El calor, además de ser una de las principales causas de fatiga, también influye directamente en la seguridad, ya que como probablemente habrás experimentado en alguna ocasión, en estas circunstancias se tiende a bajar la guardia y es más fácil cometer ciertos errores de conducción. Aunque estés pensando que encender el aire acondicionado es la solución, no siempre es suficiente…
El laminado de lunas como climatizador del coche
Como ya hemos comentado en otras ocasiones, el laminado de lunas consiste en fijar una capa adhesiva especial en la cara interna de los cristales. Tradicionalmente se recurría a esta solución para añadir un valor estético al vehículo pero entre sus múltiples ventajas, ¿sabías que también puede reducir considerablemente el consumo del coche al poner en funcionamiento el aire acondicionado?
Al oscurecer las ventanillas, conseguirás minimizar el impacto de los rayos de sol en el interior del vehículo. Esto no sólo permite que el climatizador tenga que hacer un menor esfuerzo para bajar la temperatura del coche cuando volvemos a cogerlo después de un rato aparcado a la intemperie, sino que durante la conducción, las lunas tintadas favorecen asimismo un mejor uso del aire acondicionado debido a que la incidencia de la radiación solar durante los desplazamientos es menor. Todo ello repercute lógicamente en un consumo de combustible más contenido.
Pero además, en los días en los que el termómetro se mantenga en temperaturas estables, ni tan siquiera será necesario encender el sistema de refrigeración, dado que el confort que proporciona el laminado de lunas será bastante notorio entre todos los ocupantes del vehículo.
Recuerda que junto con el ahorro en carburante también disfrutaremos de una mayor comodidad en la conducción ya que la menor incidencia de los rayos solares consigue que nuestra vista permanezca más descansada. Según el tipo de laminado que elijas, es posible bloquear la luz del sol hasta en un 99%, por lo que si vives en una zona calurosa, ésta es una solución idónea para emplear menos energía, siendo más respetuoso con el medioambiente que con la activación del aire acondicionado.
No obstante, la ley no permite beneficiarse de estas ventajas en todos los cristales del coche, sino que únicamente está permitido oscurecer las ventanillas laterales traseras y la luna anterior. Para disfrutar de esta solución con plenas garantías, puedes acudir a alguno de nuestros centros Carglass® donde te ofrecemos láminas de control solar de primera calidad, perfectamente homologadas y que pueden durar hasta 10 años.
Así que si quieres ahorrar gasolina y ser más comprometido con el medioambiente… ¡apúntate al laminado de lunas!
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