Viajar con un gato en coche no es tarea fácil. Generalmente, los gatos no tienen mucha fama de que les guste viajar en coche y menos en transportín. La mayoría de gatos padecen de mucha ansiedad y estrés cuando se encuentran en este tipo de situaciones.
Una buena opción, si viajas con gatos, es aplicar el laminado de lunas que ofrecemos en Carglass para proteger a tu mascota y evitar los rayos UV, así como que el sol los deslumbre directamente, manteniendo el interior del vehículo algo más fresco.
En determinadas ocasiones (aunque no nos guste), nos vemos obligados a llevarlos en coche y hacer una determinada ruta, ya sea para ir al veterinario, vacaciones, cambio de domicilio… Cómo sabemos que no es tarea fácil, a continuación te explicamos cómo llevar a un gato en el coche y te daremos algún que otro consejo.
¿Cuántas horas puede viajar un gato en coche?
La respuesta a esta pregunta puede ser muy diversa, ya que en gran medida dependerá de la tolerancia del animal. Eso sí, se recomienda que los animales no viajen durante más de dos horas seguidas. Es importante realizar distintas paradas para hidratarse, permitir que estire las piernas y haga sus necesidades.
Si necesitas realizar un viaje muy largo en coche y crees que tu gato no se sentirá bien, te recomendamos que te plantees la opción de dejarlo a cargo de una persona de confianza e incluso dejarlo en casa siempre y cuando alguien pueda ir a visitarlo, darle cariño, darle de comer y beber, limpiarle el arenero…
En el caso de que sea imprescindible que tu gato viaje contigo aunque el trayecto sea largo y pesado… ¡Sigue leyendo para más consejos!
¿Cómo llevar a un gato en coche?
No puedes llevar a tu gato en coche de cualquier manera, ya que podrías cometer una infracción. Es fundamental conocer la legislación de cada país, garantizando así tanto la seguridad de tu mascota como la del resto de pasajeros. La DGT afirma que la mejor manera de viajar con animales de pequeño tamaño en un coche es mediante un transportín. La circulación con animales sueltos en el interior del vehículo queda totalmente prohibida, ya que podrían suponer un grave peligro durante la conducción. Si no dispones de transportín o si tu gato no tolera de ninguna manera entrar en él, la DGT permite la circulación mediante un cinturón especial para animales, el cual va anclado al arnés del animal y debe quedar sujetado por completo.
En caso de viajar a otro país, es importante que el gato esté correctamente identificado mediante la implantación de microchip identificativo y pasaporte.
¿Cómo llevar un transportín de gato en el coche?
En el caso de optar por la opción del transportín, este debe permanecer cerrado en una zona segura y fija, evitando así que se desplace por el vehículo, causando cualquier problema en caso de accidente. Una opción para colocarlo y que no se mueva es ponerlo en el reposapiés de los asientos traseros e incluso en el asiento trasero atado con el cinturón de seguridad. Otra opción es colocarlo en el maletero, siempre y cuando sea abierto, y podamos ajustarlo correctamente para evitar desplazamientos.
Consejos para viajar con gatos en coche
A continuación te detallamos algunos consejos para viajar con tu gato en coche y hacerle el trayecto más ameno.
- No darle de comer antes de iniciar el trayecto: De esta manera evitaremos que se le revuelva el estómago y acabe vomitando.
- Que haga ejercicio antes de emprender el viaje: Si tu gato está cansado, lo más probable es que se acabe durmiendo durante el trayecto y se le haga el viaje menos pesado.
- Deja que huela el vehículo: Dos o tres días antes, deja que tu gato huela el interior del coche y se familiarice.
- Evita que el gato salga del transportín durante el trayecto: Permítele salir únicamente cuando realices las paradas, evitando así posibles problemas.
¡Ahora ya sabes un montón de trucos para que tu gato viaje cómodamente y poder pasar el tiempo libre de tu escapada con él! ¿Estás listo para vivir un montón de aventuras con la mejor compañía?
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