Puede que tengas grandes recuerdos de todos los buenos momentos que te ha deparado tu coche, pero a todo vehículo, incluso a los que más pegatinas de la ITV acumulan por su longevidad, les llega un día el final de su vida útil. O puede que hayas sufrido un accidente que haya dejado el coche irrecuperable. O que el coste de la última reparación ya sea superior al valor del propio vehículo. En cualquiera de estos casos debes saber cómo dar de baja un coche definitivamente y cómo hacerlo con totales garantías.
¿Qué documentación debo aportar?
Para empezar, no le tengas miedo al trámite de despedirte de tu coche, que es mucho más simple que otras operaciones como, por ejemplo, la compra-venta entre particulares. En el caso de turismos y vehículos comerciales de menos de 3.500 kg, sus propietarios tan solo deben aportar la ficha técnica del vehículo, el permiso de circulación de éste y el DNI o NIE. Con esos tres documentos se acude a un Centro Autorizado de Tratamiento (CAT), los antes conocidos como desguaces, y se solicita la baja definitiva. Estos centros se encargan de separar, etiquetar y tratar para su reciclaje los distintos componentes del coche, lo que ayuda a la protección del medio ambiente.
Si en lugar del propietario entrega el coche otra persona, el titular debe haber firmado una autorización para ello y hay que aportar el DNI tanto del propietario como de la persona que actúa en su nombre. Si quieres saber cuál es el CAT más cercano de los cerca de 300 que hay repartido por España, consulta en la web de la DGT .
A su vez, el CAT te proporcionará un certificado de destrucción y un informe de baja oficial que emite la DGT, por el que se indica que el coche ya no está en el Registro. Con este documento, cuya autenticidad puedes comprobar en Internet gracias al DGT , te será útil si tienes que acreditar que tu vehículo ha causado baja en cualquier Administración.
No tendrás que abonar ninguna tasa
Si acudes con tu vehículo al CAT no tendrás que abonar tasa alguna. Si tienes un vehículo comercial de peso superior a 3.500 kg. Puedes elegir entre llevar el vehículo a un CAT, que es lo más aconsejable y en cuyo caso tampoco tendrás que pagar nada, o dar la baja definitiva en la Jefatura de Tráfico.
¿Con la baja definitiva evitaré otros pagos?
Sí, una vez que el coche está dado de baja, ni el ayuntamiento ni otros organismos públicos pueden reclamarnos pagos correspondientes al vehículo. Pero para eso recuerda que es imprescindible tener el justificante de baja definitiva o temporal de la DGT. En el caso de los seguros, avisa a tu compañía con antelación de que vas a dar de baja el coche, ya que podrían pedirte el pago periódico de la póliza como cuando el coche estaba dado de alta. Si no avisas a la compañía, y ésta te pasa el cobro del seguro, puedes pedir que te devuelvan la cantidad que corresponde al periodo de tiempo en el que el coche ya estaba de baja.
Si aún no es tiempo de dar de baja tu coche y tienes algún desperfecto que reparar, por ejemplo en tu parabrisas, no dejes pasar la oportunidad de solucionarlo en Carglass. ¡Pide cita ahora!
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