Hoy en día existe una gran variedad de marcas y modelos, pero únicamente hay dos posibilidades en cuanto al cambio de marcha de los coches; cambio de marchas automático o manual. Es curioso que dependiendo del país en el que nos encontremos predomina más un tipo u otro. Por ejemplo, España tradicionalmente es un mercado de coches manuales, en cambio, Estados Unidos es un país que generalmente utiliza coches automáticos. De manera general, la posición se marca con la inicial del modo de la caja de cambios al que corresponde, cuyo significado es generalizado en todos los fabricantes del mundo.
Marchas del coche automático
A continuación te explicamos cómo funcionan las marchas del coche automático y qué significa cada una de ellas.
P (Parking)
Podemos afirmar que esta posición es la más sencilla de todas. Su inicial hace referencia a la P de Parking, es decir, la posición de aparcamiento. Cuando el cambio de marchas se encuentre en este lugar, bloqueará la caja de cambios estando el motor encendido o parado y sin ninguna marcha engranada. De esta manera, evitaremos que el vehículo se mueva, incluso estando en pendiente y no teniendo el freno de mano puesto.
R (Reverse)
Esta es la segunda posición más sencilla. Su inicial corresponde a “reverse”, que en inglés significa “a la inversa” o “al revés”. Es decir, hace referencia a la marcha atrás. Generalmente y, sobre todo, en la caja de cambios automática, para poner esta posición también debemos presionar un botón al mismo tiempo. Cabe destacar, que esta posición se encuentra en ambas tipologías. Es decir, en coches automáticos y en manuales.
N (Neutral)
Esta posición hace referencia al “punto muerto” de toda la vida. En este caso, la caja de cambios no está engranada a ninguna marcha ni está bloqueada de ninguna manera. En caso de pendiente, debemos asegurarnos de tener puesto el freno o si no el coche se moverá.
D (Drive)
Esta posición la utilizaremos únicamente para avanzar el vehículo hacia delante. De este modo, el vehículo de manera automática engrana las marchas tanto de manera ascendente como descendente. ¡No tendrás que estar pendiente del cambio de marchas! Únicamente deberás preocuparte en conducir, acelerar y frenar.
M (Manual) o S (Secuencial)
La mayoría de vehículos con cambio de marchas automático disponen de esta posición. Te ofrecen la posibilidad de conducir de manera manual, es decir, teniendo el control absoluto del cambio de marchas a través de la palanca de cambio o en las levas de detrás del volante, marcadas como “+” para subir o “-” para bajar de marcha.
Marchas del coche manual
El cambio de marchas manual es bastante más complejo en comparación al cambio de marchas automático. A continuación, te explicamos cómo funcionan. Dependiendo de la marca y modelo del vehículo, el número de marchas puede ser distinto en cada caso. Por norma general, el coche cuenta con 5 o 6 marchas, la marcha atrás y la posición neutra o punto muerto. Las 5 o 6 marchas (dependiendo del coche) mencionadas anteriormente se pueden dividir en dos grandes subgrupos:
Marchas cortas
En este caso estaríamos hablando de las marchas 1,2 y 3, ya que ofrecen una gran potencia pero muy poca velocidad. Generalmente, se utilizan cuando se circula por ciudad, donde la velocidad debe ser reducida. Por ejemplo, si tuviéramos que subir una pendiente muy pronunciada, las marchas cortas son también las que pondríamos en uso.
Marchas largas
En este subgrupo se encuentran las marchas 4, 5 y 6. Hablamos de marchas que dan muy poca potencia al vehículo, pero nos permiten alcanzar grandes velocidades. Lo más común es emplearlas para conducir por autovías o autopistas, donde la velocidad es superior.
Te recordamos que, sea cual sea tu vehículo, es importante mantener una correcta visión en carretera. Por eso mismo, te recomendamos que realices un tratamiento antilluvia y antimosquitos, ya que aportará un efecto hidrófugo a tu parabrisas, mejorando la visibilidad y la limpieza.
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