Pese a que el cinturón de seguridad de un vehículo pueda parecer un mecanismo muy simple, es uno de los mejores aliados en materia de seguridad con los que contamos en un coche, además de los sistemas ADAS del mismo. Sin embargo, a veces podemos encontrarnos con que un cinturón de seguridad atascado no sale, ya sea por algún tipo de rotura u obstrucción que dificulta su funcionamiento habitual. ¿Qué podemos hacer en estos casos? En Carglass® recomendamos la revisión periódica de elementos de seguridad tan importantes como este, así como ciertos consejos para su correcto mantenimiento. De esta manera podemos evitar situaciones como que el cinturón atascado se convierta en algo habitual. Mantenerlo en buen estado no es complicado, pero sí requiere un cierto grado de atención para que no se atasque y cumple correctamente su cometido.
¿Por qué se atasca un cinturón?
Si un cinturón de seguridad atascado no sale, puede deberse a multitud de motivos. En primer lugar tenemos que ser conscientes del tipo de cinturón que tiene nuestro coche. Una vez conocido este aspecto veremos que la mayoría son fácilmente solucionables, como posible suciedad o atrapamiento con los asientos. Sin embargo, si observamos un cinturón de seguridad roto por una deformación de la cinta o cortes en la misma, será necesario acudir a un taller de la marca para que un profesional revise el cinturón de seguridad mediante su desarmado. No obstante, otros problemas como la suciedad son rápidamente solventables por nosotros mismos si sabemos localizar el problema del cinturón atascado. Incluso puede que ni siquiera tengan que ver con el mismo cinturón o su cinta, sino con elementos adyacentes al sistema que puedan estar influyendo en su correcto funcionamiento.
Soluciones a un cinturón atascado
¿Qué podemos hacer para intentar solucionar con nuestras propias manos un problema con el cinturón? Depende de lo que esté pasando, existen posibles remedios para solventarlo.
Suciedad en el cinturón
Puede que el cinturón de seguridad haya acumulado suciedad en la cinta que acabe por impedir que ésta se enrolle y desenrolle con facilidad. Para remediarlo, lo mejor es estirar por completo la misma y limpiarla con una mezcla de agua y jabón hasta que consideremos que está totalmente limpia. La dejaremos secar y, una vez hecho esto, la enrollamos de nuevo comprobando que no se atasca nuevamente.
Tope del cinturón
Muchas veces no nos fijamos, pero la cinta del cinturón cuenta con un tope de plástico de color negro que impide que éste se enrolle por entero al no usarlo. No está de más realizar una comprobación periódica de este elemento para ver si sigue en su posición original o sustituirlo en caso negativo.
Posición del asiento
La posición del asiento en ocasiones puede derivar en un cinturón de seguridad atascado, y algo tan simple como comprobar dicha posición para colocarlo correctamente o en una posición más vertical podría solucionarlo. En los asientos traseros, a veces al abatirlos para ganarle espacio al maletero hace que después el recolocarlos hagamos que el cinturón quede enganchado: nada más fácil que repetir el movimiento para que el cinturón recupere su posición original.
Obstrucción del sistema
En ocasiones, puede que algún elemento haya ocasionado una obstrucción del sistema, provocando que el cinturón de seguridad se quede atascado debido a un bloqueo del mismo. Para solucionarlo, debemos eliminar dicho elemento u objeto mediante el desmontaje del sistema de anclaje y posterior retirada.
¿Cómo saber si el cinturón funciona correctamente?
Hoy en día, no concebimos un vehículo sin este elemento de seguridad. Ya hemos visto cómo solucionar los posibles problemas que pueden hacer que se atasque y no cumple con su cometido, pero…¿sabes identificar si el cinturón está funcionando correctamente y lo llevas bien puesto? Tu seguridad depende de ello desde 1959, fecha en la que el cinturón de tres anclajes se convirtió en una realidad en el mundo de la automoción en ciertos vehículos, siendo hoy en día un estándar obligatorio que ha salvado innumerables vidas en la carretera. Para saber si nos está protegiendo como debe, debemos asegurarnos que lo llevamos lo más pegado posible al cuerpo sin dobleces de ningún tipo en la cinta, así como que está correctamente asegurado en su cierre. Asimismo, nunca debemos llevar puestos abrigos ni prendas de abrigo voluminosas dentro del vehículo con el cinturón puesto, ya que pueden comprometer seriamente su cometido en caso de choque o accidente.
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