Seguro que cuando has necesitado un coche nuevo se te ha pasado por la cabeza el dilema de: ¿será mejor comprarlo o alquilarlo a través de renting? Aunque este último servicio siempre ha estado asociado a las flotas de vehículos de empresas, en los últimos años cada vez más particulares se decantan por esta opción. ¿Quieres conocer las ventajas que tiene y si te interesa más alquilar que comprar? Te contamos los puntos básicos de cada modalidad y tú decides…
Al hablar de renting nos estamos refiriendo a un alquiler de larga duración, a través del cual se puede disfrutar de un coche durante un cierto periodo de tiempo, normalmente entre 1 y 5 años como máximo. La cuota mensual que se paga no da derecho a disponer del vehículo en propiedad, sino que es la propia compañía de renting la que mantiene la titularidad del mismo.
Ventajas del renting frente a la compra
Una de las mayores ventajas del renting de coches es la inclusión de un amplio abanico de servicios en la tarifa. Es decir, si te decides por esta opción, simplemente tendrás que preocuparte por pagar la cantidad correspondiente cada mes y repostar el vehículo, ya que la compañía se encarga del resto de gastos relativos a mantenimiento, reparaciones, seguro, impuestos, etc.
A diferencia de la compra de un coche, no es necesario realizar ninguna inversión inicial para disfrutar de un modelo nuevo y en cuanto al abono de la cuota puede ser fácilmente asumible debido a que se incorpora como un gasto fijo mensual.
Al mismo tiempo, si eres un conductor que prefiere cambiar de coche cada poco tiempo, el renting es la mejor alternativa dado que obliga a alquilar un modelo distinto cuando finaliza el contrato. No obstante, en el caso de que decidas cancelar el acuerdo antes del transcurso de los años o de los kilómetros establecidos, deberás hacer frente a una sanción.
Si eres autónomo o tienes una empresa, el renting de coches también te ofrece una serie de ventajas fiscales interesantes, algo de lo que no podrías beneficiarte como cliente particular.
Renting vs compra: ¿cuál es la mejor decisión?
Como todo en la vida, elegir una opción u otra dependerá de las necesidades de cada persona. Antes de tomar la decisión es primordial hacer números y valorar cuáles son tus preferencias personales.
En definitiva, el precio del renting durante 4 años aproximadamente donde sólo tengas que pagar el combustible se asimila a la compra de un coche que se utilice durante el mismo periodo. No hay que olvidar que los vehículos son un bien que, a diferencia de otros, se van devaluando con el paso del tiempo y que una vez transcurridos los primeros años es cuando más averías comienzan a aparecer, con el consiguiente gasto que ello conlleva.
En definitiva, la conclusión sería apostar por el renting siempre que quieras disfrutar de un coche nuevo cada cierto tiempo y optes por no asumir ningún gasto extra, salvo la cuota mensual. No obstante, si deseas un vehículo a largo plazo, sin duda la compra es la alternativa más válida.
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