La Vuelta llega a su fin, pero no queremos resistirnos a hacer un repaso de lo vivido durante estos días inolvidables para nosotros, repletos de madrugones, kilómetros, bicilicuadoras, algunas lunas reparadas y gente, mucha gente que se ha acercado a nuestro stand con la curiosidad de probar nuestros zumos de frutas naturales por toda la geografía española.
Todo comenzó con nuestra original propuesta de stand: un par de bicicletas estáticas transformadas en licuadoras de frutas con propulsión humana, facilitadas por Bicicletas sin Fronteras, para atraer al público asistente y ofrecerles un sano y natural zumo a cambio de un poco de paciencia en la cola y esfuerzo a los pedales. El resultado han sido más de 1.500 kg de fruta exprimidos y convertidos en 11.500 zumos naturales de diversas frutas, entre las que las más apetecidas han sido el melón y la sandía, sin olvidar el kiwi. Además de dar de beber a nuestros visitantes, hemos pretendido realizar una labor divulgativa sobre la bondad de la dieta sana y el ejercicio físico, a través de este mecanismo a pedales cuyo premio era una bebida natural recién hecha. Esperamos haberlo conseguido.
Pero no todo han sido zumos, y lo nuestro son las lunas de vehículos. Como no podía ser de otra forma, también hemos reparado y sustituido diferentes lunas del equipo IAM, del que nos hicimos buenos amigos a lo largo de la prueba. Todos los impactos de su camión y su autobús quedaron reparados en plena calle gracias a nuestros talleres móviles, mientras que una furgoneta del mismo equipo vio remplazada su luneta trasera al completo, al ser imposible la reparación.
Atrás quedan kilómetros y kilómetros de vivencias y trabajo en equipo en los que nuestro objetivo ha sido en todo momento ayudar a los demás y fomentar una vida más sana para todos los que han querido acercarse a nuestra carpa a lo largo de todas estas semanas. Estamos muy orgullosos de nuestro equipo de técnicos y azafatas, Xavi, Luis, Clara y Celia, que han trabajado sin descanso durante jornadas maratonianas en las que tuvimos ocasión de regalar miles de pequeños coches Carglass® y miles de nuestros vasos originales, con declaración de amor por la bici incluida.
Ha sido un placer y esperamos tener la ocasión de volver el año que viene, para vivir de nuevo una experiencia única y muy enriquecedora de contacto directo con el ciclismo y su fantástico público.