Cuando una mujer se queda embarazada, el cambio que ésto supone en algunas de sus rutinas habituales pueden llegar a plantear ciertas dudas. El hecho de conducir embarazada es una de ellas, ya que en muchas ocasiones -especialmente en madres primerizas- no se sabe muy bien la forma de confluir la conducción con el embarazo. Éstas son algunas de las dudas más frecuentes:
¿Se puede conducir embarazada? ¿Hasta qué mes de embarazo se puede conducir? ¿Es seguro viajar en coche durante el embarazo? ¿Cómo debo ponerme el cinturón de seguridad? Tenerlo todo claro es muy importante a la hora de ponerse al volante, estando o no embarazada.
Ahora bien, antes de arrancar el motor y emprender un trayecto -aunque sea como copiloto-, lo más recomendable es acudir a la consulta con el médico de cabecera para seguir en todo momento sus recomendaciones. No todos los embarazos son iguales ni permiten las mismas rutinas o recomendaciones, por lo que la opinión del médico prevalecerá sobre la de cualquier blog de internet. ¿Qué debemos tener en cuenta?
Consejos para conducir embarazada
Coloca bien el cinturón de seguridad
Hasta el año 2006, las mujeres embarazadas estaban exentas de usar el cinturón de seguridad. Sin embargo, actualmente es obligatorio al conducir embarazada y, de hecho, es especialmente necesario. En caso de no llevarlo, un accidente puede conllevar un gran riesgo tanto para la integridad física de la madre como también de la del bebé.
También es esencial ponerlo de la forma correcta para que no sea peligroso para ninguno de los dos. Pregunta a tu ginecólogo o comadrona la forma correcta de colocarlo para que tu bebé y tú podáis viajar de forma totalmente segura.
En el mercado existen dispositivos y cinturones especiales para embarazadas que garantizan la posición adecuada del mismo, ya que en caso de accidente, una mala colocación puede poner en riesgo al feto o provocar un parto prematuro.
¿Hasta qué mes de embarazo se puede conducir?
Otra de las dudas más comunes a la hora de conducir embarazada es la de hasta qué mes de embarazo se puede conducir o si hay meses en los que no es aconsejable hacerlo.
Aquí debe imperar la opinión del médico/a y de la ginecóloga/o, así como las sensaciones personales al volante. Una mujer embarazada debe sentirse cómoda y segura al volante en todo momento, ya que no tendrá nada que ver conducir durante la 3ª semana de gestación que durante la 25ª.
Por tanto, si el ginecólogo/a no se opone y no se trata de un embarazo de riesgo, se puede viajar durante todo el período sin problema adaptando cuestiones como la posición del asiento o del volante, así como del cinturón de seguridad.
Evita desplazamientos largos al final del embarazo
Respecto a las futuras madres conductoras, no es muy aconsejable coger el coche para desplazamientos largos durante el último trimestre: puede ser realmente incómodo y cansado…aunque todo depende de las sensaciones personales. Si la embarazada está a gusto y no contradice la recomendación médica: ¡a conducir!
Planificar las rutas con antelación
Si se va a hacer un viaje largo en coche (por ejemplo durante las vacaciones veraniegas), recomendamos planificar tu viaje en coche con antelación. De esta forma se pueden evitar contratiempos y prisas que lleguen a ser estresantes.
Es conveniente escoger una ruta que tenga áreas de servicio para poder estirar las piernas, pasear, hacer movimientos circulares con los tobillos o ir al baño. Para aumentar la comodidad durante el camino, se puede viajar en los asientos traseros, donde es más fácil estirar las piernas. Además, es recomendable tener una postura correcta a la hora de conducir para evitar el dolor de espalda.
También se puede usar un cojín lumbar para aliviar el dolor de esa zona al estar sentada durante mucho rato. En caso de ir al volante, lo recomendable es viajar con otra persona para hacer turnos en la conducción, dosificando así el cansancio.
También es importante tener en cuenta posibles imprevistos de urgencia que puedan surgir donde se requiera parar el coche en lugares sin estacionamiento durante el viaje. Para evitar accidentes y facilitar la visión de los demás conductores, es recomendable llevar consigo equipamiento reflectante o Help Flash. Este último es una luz de emergencia que en caso de avería o accidente te permite señalizar tu vehículo en cuestión de segundos sin necesidad de salir del mismo.
Ropa y calzado cómodos
También es muy recomendable el uso de ropa cómoda, con tejidos naturales, piezas que no aprieten y calzado holgado que no apriete demasiado los pies.
Entre el equipamiento del vehículo, no está de más llevar agua y comida para evitar la deshidratación o posibles bajadas de tensión.
Documentación a mano
Por último, y si es posible, se recomienda llevar toda la documentación referente al embarazo. Antes de emprender cualquier viaje, recuerda pedirle a tu médico o matrona que te facilite un documento en el que conste el historial del embarazo. ¡Ah! Y no olvides llevar también tu seguro médico y de viaje, en caso de que dispongas de uno.
Y tú, ¿tienes algún otro consejo para otras futuras mamás?
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