¿Quieres que el parabrisas del coche dure? Sigue estos consejos

El parabrisas del coche juega un papel clave en tu vehículo. No sólo te protege cuando estás en marcha y te permite ver con claridad todo lo que está por delante del coche como la carretera, las señalizaciones y el resto de vehículos. Además es capaz de soportar fuertes tensiones estructurales. El airbag del acompañante también utiliza el parabrisas como soporte si se abre. Por eso tener el parabrisas del coche en perfecto estado es fundamental para tu seguridad y la de quienes te acompañan.

A lo largo de la vida útil del coche ocurrirán imprevistos y el cristal puede sufrir daños o una rotura en cualquier momento, pero un buen mantenimiento te ayudará a aprovechar sus prestaciones al máximo y conservarlo por muchos años. Sigue estos consejos para no tener que cambiar el parabrisas antes de tiempo.

Reemplaza las escobillas cada 12 meses

Unas escobillas en mal estado pueden dejar rayones en el parabrisas. La fatiga al volante aumentaría y la visibilidad del conductor se vería comprometida, lo que iría contra las normas elementales de la seguridad vial. Una buena referencia para sustituir este dispositivo que integran todos los coches son los 12 meses, aunque en algunos casos, como en los vehículos que se usan poco, ese tiempo puede ser hasta de 24 meses. Ten en cuenta que hay muchos factores que las deterioran, como el calor y el frío extremos, las heladas o el polvo. Los precios de unas escobillas oscilan mucho en función de la marca que elijas, aunque se trata de una inversión que, sin duda, merece la pena.

Descubre cómo tratar el parabrisas cuando hiela

Si eres de los que cuida su coche sabrás que en invierno, si ha helado, el cristal puede verse totalmente afectado por la baja temperatura. Nunca debes descongelar el parabrisas vertiendo agua caliente por encima. De esa forma podría resquebrajarse. Utiliza el sistema de climatización de tu coche y espera unos minutos a que, poco a poco, el cristal vaya tomando temperatura. Asegúrate de que el chorro de aire no se dirige directamente al cristal, sino que va calentando el habitáculo y llega al parabrisas de forma indirecta. Lo ideal sería que el cristal se deshelara progresivamente. Para retirar el hielo no utilices objetos que puedan deteriorar el cristal, como tarjetas de crédito u otros. Tampoco uses sal ni otros productos agresivos.

El limpiaparabrisas es tu mejor aliado

Limpia el parabrisas antes de que esté muy sucio, porque te costará menos y obtendrás mejores resultados. Además de retirar la suciedad a conciencia, cuando hagas lavado general del coche acuérdate de rellenar cada cierto tiempo el líquido del limpiaparabrisas (algunos modelos detectan el nivel bajo y se lo comunican al conductor en el cuadro de mandos). Una buena idea es utilizar el cepillo de limpieza que suele haber en las estaciones de servicio cuando se llena el depósito de combustible. Con ello se puede retirar la mayor parte de la suciedad.

Repara los impactos en el parabrisas antes de que sea tarde

Lo que puede parecer un impacto pequeño e inofensivo en el parabrisas del coche puede transformarse en un problema mayor si la rotura se convierte en una grieta irreparable, lo que afectaría directamente a la visibilidad y, por lo tanto, a tu seguridad.

Carglass ofrece un servicio de reparación del parabrisas con el servicio más profesional. Para reparar los impactos en tu parabrisas puedes solicitar el servicio de unidad móvil, que puede desplazarse hasta tu domicilio, trabajo o donde prefieras o, pedir una cita para ir a cualquiera de nuestros talleres donde podrán reparar tu parabrisas en cerca de 30 minutos.

Recuerda que en Carglass contamos con cristales homologados, siempre con el certificado de calidad y garantía. ¡Pide cita ahora!